(Víctor Sariego, 08/03/2019).- “Mujer y mayor, la receta perfecta para la desigualdad habitual en las mujeres de cualquier edad, más otras específicas, como la diferencia respecto a las pensiones por las diferencias en años pasados, los cuidados o incluso el acceso a la cultura y la formación”, explica Dora, mujer mayor, alumna de las Aulas Senior de Galicia, Ategal, que este 8 de marzo acudió a la marcha que convocaba la entidad para visibilizar, no sólo la desigualdad entre las mujeres como colectivo, sino también otras desigualdades específicas de las mujeres mayores.
Precisamente, para llamar la atención sobre estas y otras desigualdades que afectan a las mujeres mayores, las Aulas celebraron en sus ocho sedes de Galicia –durante toda esta semana– varios actos para conmemorar el Día de la Mujer. El calendario de actividades culminó el propio viernes con una marcha del alumnado de Ategal por la ciudad a la que invitaron a toda la ciudadanía.
Desigualdad e invisibilidad
La directora de Ategal, Paula Sande, recuerda por ejemplo que las mujeres mayores de 65 años cuidadoras no profesionales representan en torno al 60 por ciento del total en España. Cifra que en Galicia puede llegar al 90 por ciento. Y que la desigualdad entre las mujeres mayores también se traduce en la conciliación familiar pues siguen siendo ellas quienes más cuidan a nietos, nietas o personas enfermas en casa.
Finalmente, que existe una gran diferencia en la salud y los servicios socio sanitarios destinados a las mujeres mayores, pues aunque viven más y tienen mayor esperanza de vida, padecen peor salud y asistencia, pues, a pesar de tener enfermedades específicas (osteoporosis principalmente, derivada de las patologías propias de la mujer, de la menor posibilidad de realizar ejercicio, y de la falta de prevención social) no disponen siempre de la atención socio sanitaria adecuada.
Y en cuanto al ámbito de Ategal, la formación de personas mayores, “aunque cada vez menos, aún prevalecen edadismos y estereotipos negativos en la sociedad que rechazan que el conocimiento y el acceso a la formación, el saber, la cultura y el ocio puedan ser cosa de mayores”. “Esto no ocurre en Ategal”, comenta Sande que pone el ejemplo de la formación en nuevas tecnologías que se imparte en las aulas que dirige, una de las fortalezas de esta entidad, en la que las mujeres tienen una parte muy activa, tanto entre el alumnado como entre el equipo docente y administrativo.
En ese sentido, concluye la responsable de las aulas, “frente al 20 por ciento de personas mayores que utilizan la tecnología digital a diario de media en España, el alumnado de Ategal llega casi al 80 por ciento”.